martes, 8 de mayo de 2012

I just haven't MET you yet

Ayer fue una de las galas más especiales del año: la MET (Metropolitan Museum). Esta gala es famosa por tener la mejor alfombra roja de todas, y tiene su sentido, ya que conmemora toda la industria de la moda.
La de ayer fue la primera vez que vi la alfombra roja en directo, aunque ya hace algún par de años que me levanto el día siguiente de la gala emocionada para ver que modelitos traen las celebs. Pues bien, pude observar algunas cosas:

1 - Cada diseñador coge a su actriz fetiche y la viste cual muñequita de trapo, además de ser su cita de la noche. Emma Stone, for example, fue con Alber Elbaz, ¿y que pasa si quería ir con su amado Andrew Garfield? pues que se aguanta. Calvin Klein pasó de coger a Emily Blunt como imagen de la marca y ella bien que pudo ir del brazo de John Krasinski. O lo que me hizo mucha gracia fue que Justin Timberlake fuera de Tom Ford y Jessica Biel de Prada... hummm.

2 - Hay diferentes maneras de elegir un vestido para ir al MET, y yo creo que va sobre el nivel de famoseo que tengas. A Katharine McPhee que tampoco es la chica más conocida del universo le dieron algunos a elegir, y cogió el que más le gustó. A Jessica Biel (que tampoco creo yo que sea para tanto, pero que es muy maja) la señora Prada le dijo "ponte este vestido y estos zapatos", y lo pobre chica chitón y se los puso. No debe ser muy bonito que te obliguen a ponerte tal o mescual ropa.

3 - Se lleva el naranja.

4 - Ser fotógrafo de "red carpet" es una de las profesiones más estresantes y chupaculos del mundo.

Y sin más dilación, mis preferidas de la noche por unas cosas o por otras.

Por sencillas y elegantes.

       

Por bellas y glamourosas.



  





Por originales.


        


Porque sí.